ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 28.07.2024. TIEMPO ORDINARIO 17. CICLO B.

EL CRISTIANISMO SE COME.

Señor Jesús, por ti sabemos que los cristianos estamos llamados a dar de comer a los que tienen hambre y sed desde hace demasiados siglos, desde hace demasiadas injusticias, desde hace demasiadas barbaries.

Señor Jesús, nos llamas a acompañar a los que tienen hambre y sed de sentido, de significado, de sensibilidad.

Señor Jesús, estamos llamados a alimentar a los que viven en hambre y sed de humanidad, de justicia, de santidad.

Señor Jesús, por ti sabemos que estamos llamados a servir a los heridos en cuerpo y alma… que estamos llamados a cuidar al que es vulnerable y frágil… que estamos llamados a estar a favor de la vida humana de toda vida humana siempre, sin excepción, esperanzadamente a pesar de tanto vacío, a pesar de tantos traumas, a pesar de tanta dureza de corazón.

Señor Jesús, que seamos audaces y valientes en esta misión de proteger a los desfavorecidos, a los que están perdidos, a los sufrientes sea cual sea su dolor, sea cual sea su herida, sea cual sea la barbarie que sufran en medio de estos tiempos que nos amedrentan, nos asustan, nos paralizan.

Señor Jesús, no hay recetas infalibles para el cuidado de la vida en esta cultura enrarecida que nos cansa, nos desconcierta, nos aturde.

Señor Jesús,  no hay fórmulas mágicas para el cuidado de la fraternidad en esta cultura tan individualista. tan polarizada, tan poco razonable.

Señor Jesús, no hay tutoriales simplones para los caminos de crecimiento humano, para los caminos de crecimiento religioso, para los caminos de crecimiento espiritual en estos tiempos que nos intimidan, nos impregnan de miedo, nos sobrepasan.

Señor Jesús, por ti sabemos que no hay atajos. Por ti sabemos que se trata de darse, se trata de desvivirse, se trata de compartir lo que somos, lo que tenemos, lo que deseamos de todo corazón.

Señor Jesús, se trata de llevarte, de decirte, de sembrarte, de encarnarte con creatividad, con pasión, con autenticidad.

Sabemos que es alimento palpable para la vida, para la libertad, para la comunión a través de nuestras presencias y nuestras acciones, a través de nuestras palabras y nuestras interpretaciones, a través de nuestros trabajos y nuestras familias.

Señor Jesús, por ti sabemos que el cristianismo se come, se deja comer y da de comer…

Señor Jesús, haznos servidores amables, humildes, incluyentes. Haznos alimento de la nueva humanidad que contigo empezó y que hunde sus raíces en el inicio de los tiempos… Haznos síntomas de la vida nueva que contigo comenzó y que se plenificará misteriosamente, amorosamente, santamente al final de los tiempos.

Señor Jesús, haznos como Tú, servidores de la vida.

carmeloampelio@gmail.com

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ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 21.07.2024. TIEMPO ORDINARIO 16. CICLO B.

TE PREOCUPAS POR NOSOTROS.

Señor Jesús, sabemos que te preocupas de nosotros.
Misteriosamente,
tu presencia,
tu impulso,
tu comunión
nos fundamenta
y nos hace arder en tu amor,
ese amor que es la energía infinita del universo.

Señor Jesús, eres la luz que puede saciar
las mentes y los corazones de todos los seres humanos
en su sed de santidad y justicia.
Hoy necesitamos mucha lucidez y nuevos caminos
para crecer en mística y en fraternidad
en estos tiempos extraños que nos tocan vivir.
Danos valentía para abrirnos a la creatividad y a la libertad,
a la entrega y a la confianza
entres tantas cruces de caminos absurdos y oscuros.

Señor Jesús,
protégenos frente al desánimo
con tu fuerza de vida.
Protégenos frente a los miedos
con tu valentía profética.
Protégenos frente a nuestros autoengaños
con tu exigencia de autenticidad,
con tus preguntas que nos atraviesan el corazón,
con tu fuego santo que nos purifica.

Señor Jesús,
entre tantos corazones rotos y mentes desconcertadas,
entre tantos desfondamientos y soledades,
entre tantos sufrimientos y tensiones
sabemos que eres el mejor refugio posible.
Señor, transfórmanos en personas acogedoras
que transmiten paz y confianza en el ser humano
y en sus procesos de crecimiento y maduración.
a pesar de tantos pesares en contra.

Señor Jesús,
despierta con poder la fuente de vitalidad inmensa
que es tu presencia
en nuestra intimidad más humana.

Señor Jesús, haz que seamos las manos que cuidan,
la mirada que siembra misericordia,
la fraternidad que hace que surja lo mejor de cada uno.

Señor Jesús,
esperanza sobre toda esperanza,
luz de toda luz,
amor sobre todo amor
a tiempo y a destiempo…
regenera nuestras fragilidades e incertidumbres
en manantiales de vida,
en energía creativa,
en increíbles capacidades de ternura y cuidado
que es lo que el mundo necesita.

Señor Jesús, por ti podemos
esforzarnos con sentido,
rezar con autenticidad,
cumplir nuestra misión
para la que nos eliges:
ser auténticamente seres humanos
para los demás.

Amén. Aleluya.

carmeloampelio@gmail.com

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ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 14.07.2024. TIEMPO ORDINARIO 15. CICLO B.

ENVIADOS

Señor Jesús, nos envías a la misión.
Siempre lo haces: nos quieres luz del mundo.
Señor Jesús, somos Iglesia: somos de los tuyos.
Somos misioneros.
¡Que seamos síntoma de tu presencia que sana y genera confianza!
¡Que seamos testigos de la santidad y de la justicia!

Hoy, intuimos que hay una sed de refugio, de silencio, de santidad
en los corazones de muchos de nuestros contemporáneos.
Hay mucha desorientación y mucha huida de las huidas.
Hay mucha tristeza de fondo.
Hay mucha soledad.
Hay mucha biografía íntima no escuchada, no querida, no sanada.
Señor Jesús, nos encontramos con tantos y tantos muy dañados en su corazón.
¡Que seamos síntoma de tu presencia que sana y genera confianza!
¡Que seamos testigos de la santidad y de la justicia!

Señor Jesús, el mundo quiere autenticidad,
quiere que hablemos sencilla y sinceramente de ti,
de tu presencia en nosotros y en la realidad,
de tu poder de sanación y de liberación
y de tu fascinante rostro de santidad.
El mundo exige y espera de nosotros
sencillez de vida,
vida de oración,
ardiente caridad para con todos,
pero especialmente para los pequeños y los pobres,
los caídos del sistema,
los nadie de nuestras ciudades,
los migrantes,
víctimas de tantos sufrimientos evitables.
¡Que seamos síntoma de tu presencia que sana y genera confianza!
¡Que seamos testigos de la santidad y de la justicia!

Señor Jesús, nos quieres radicalmente alternativos:
centrados en lo esencial,
humildes,
fraternales,
desapegados de sí,
austeros,
transparentes,
veraces,
cabales…
personas para los demás
que generan nuevas formas de convivencia,
nuevas formas de economía,
nuevas formas de familia,
nuevas formas de educación,
nuevas formas de acogida,
nuevas formas de política…
nuevas formas de Iglesia.
¡Que seamos síntoma de tu presencia que sana y genera confianza!
¡Que seamos testigos de la santidad y de la justicia!

Señor Jesús, quisiéramos ser
muy humanos y muy santos,
muy novedosos y muy enraizados
en la historia de santidad de la humanidad.
¡Que seamos síntoma de tu presencia que sana y genera confianza!
¡Que seamos testigos de la santidad y de la justicia!

Señor Jesús,
marcados por tu santidad,
asidos por tu santidad,
alimentados por tu santidad
surge de nosotros
un canto de alabanza,
un canto de confianza,
un canto de alegría:
Proclama nuestra alma
tu grandeza, Señor…

carmeloampelio@gmail.com

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ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 07.07.2024. TIEMPO ORDINARIO 14. CICLO B.

FALTA DE FE

Señor Jesús, nos conoces.
Conoces nuestras carencias,
nuestra debilidades humanas, demasiado humanas.
Conoces de verdad lo que habita en nuestro corazón.
Nos conoces mejor que nosotros mismos a nosotros mismos.

Señor Jesús, auméntanos la fe.
Señor Jesús, auméntanos la inteligencia de tu salvación.
Señor Jesús, auméntanos la sabiduría que hace de nosotros síntoma evidente de tu reino de vida.

Señor Jesús, nuestra fe muchas veces es coja y quejumbrosa.
Nuestra fe muchas veces suena desafinada y atemorizada frente a los desafíos que el desprecio a la vida nos pone por delante.
Nuestra fe muchas veces nos impulsa poco a llevar libertad, alegría y paz a los demás.

Señor Jesús, auméntanos la fe.
Señor Jesús, auméntanos el compromiso con tu deseo de salvación de para todos.
Señor Jesús, auméntanos la sabiduría de la santidad y la justicia que nos propones como guía de nuestra vida.

Señor Jesús, nos conoces.
Nos cuesta ver tu presencia que salva y que nos invita a ser apasionados del reino de la vida.
Nos cuesta comprender que el sí a la vida es la clave de la plenitud que ofreces.
Nos cuesta actuar como colaboradores del cuidado de tú ofreces, misteriosamente, a todos los seres humanos.

Señor Jesús, vivimos tiempos extraños que nos asustan.
Señor Jesús, vivimos tiempos convulsos que nos desconciertan
Señor Jesús, vivimos tiempos nerviosos que nos quitan la paz.

Señor Jesús, tenemos miedo a crecer como hijos e hijas de Dios.
Señor Jesús, tenemos miedo a ampliar nuestra zona de confort.
Señor Jesús, tenemos miedo a explorar nuevos caminos,
nuevos modos,
nuevas presencias.

Señor Jesús, auméntanos la fe.
Señor Jesús, auméntanos la conciencia de ser misioneros.
Señor Jesús, auméntanos la conciencia de ser testigos audaces de tu amor universal.

carmeloampelio@gmail.com

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ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 30.06.2024. TIEMPO ORDINARIO 13. CICLO B.

QUIÉRAMOS VIVIR EL ASOMBRO DE LA FE

Señor Jesús, la Palabra nos dice
que nos sacarás del abismo
de la dureza de la vida…

Ante ti, quisiéramos vivir
el asombro de la fe,
el asombro de la confianza,
el asombro ante tu poder de salvación.

Pero es muy difícil.
No sabemos cómo reconocer los dones que nos alimentan.
No sabemos cómo contemplar la gracia que nos impulsa.
No sabemos cómo vivir para crecer en la espiritualidad
que realmente necesitamos
en los tiempos que nos tocan vivir.

Señor Jesús, vivimos
entre miedos,
entre crisis,
entre absurdos.

Señor Jesús,
tantas y tantas veces
el estupor
ante la dureza de la vida
nos golpea
como si no hubiera alternativa,
como si no hubiera paz,
como si no hubiera salvación.

Muchas veces nos abruman las preguntas sedientas…

¿Cómo confirmar que nos encaminamos a la vida de toda vida?

¿Cómo saber que nuestras heridas no son la última palabra?

¿Cómo superar el pesimismo y el fracaso que nos tanto nos dañan?

¿Cómo no hui, alucinados, hacia el egoísmo y el individualismo?

¿Cómo no maldecir?

¿Cómo no blasfemar?

¿Cómo saber de verdad que no estamos solos,
que no somos una insignificancia cósmica,
que no nos disolveremos como una ínfima brizna bioquímica?

Señor Jesús,
muchas nos sentimos
caminantes a la intemperie,
con sed…
una sed que surge de nuestro corazón herido…
una sed que refleja nuestros miedos…
una sed que nos urge a buscarte aún más…

Para esta sed
hace ya mucho tiempo
que no nos valen
las palabras de siempre
que suenan vacías,
que suenan burocráticas,
que suenan ininteligibles…
palabras que no nos ayudan a dar gracias de todo corazón,
palabras que no nos impulsan a la alegría entrañable, ,
palabras que no nos alimentan en las necesidades reales que vivimos día a día.

Señor Jesús,
no escuchamos hablar de Ti
con palabras vivificantes,
significativas,
luminosas
para nosotros
y para quienes nos rodean…
… con palabras vigentes
que den esperanza
auténtica…
… con palabras que nos lancen
a la libertad,
a la alegría,
al cuidado real de toda vida.

Señor Jesús,
¿dónde los santos?
¿dónde los profetas?
¿dónde los testigos
que nos señalen
caminos transitables
y humanizantes?

Señor Jesús,
ilumínanos.

carmeloampelio@gmail.com

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ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 23.06.2024. TIEMPO ORDINARIO 12. CICLO B.

¿POR QUÉ TENÉIS MIEDO? ¿AÚN NO TENÉIS FE?

Señor Jesús, vivimos hastiados de ruidos que nos asustan.
Señor Jesús, que sintamos tus manos sobre nosotros.

Señor Jesús, vivimos sumergidos en de masas desvertebradas.
Señor Jesús, que sintamos tus mirada personal sobre nosotros.

Señor Jesús, vivimos embebidos en muchedumbres solitarias.
Señor Jesús, que sintamos que nos llamas por nuestro nombre.

Señor Jesús, nos hablan ecos y ecos de tinieblas desde nuestro interior.
Señor Jesús, háblanos con la fuerza de poder sanador.

Señor Jesús, nos secuestran la atención malévolamente.
Señor Jesús, háblanos de lo esencial, de ti y de tu amor sobre todo amor.

Señor Jesús, nos agobiamos porque no tenemos tiempo para tanto reclamo externo.
Señor Jesús, sosiéganos con presencia que recrea y enamora.

Señor Jesús, nos azuzan nuestras ansiedades.
Señor Jesús, cálmanos con tus palabras de vida eterna.

Señor Jesús, nos abruman nuestras explosiones de estrés.
Señor Jesús, apacíguanos con tu paz y tu confianza.

Señor Jesús, nos asustan nuestras carencias.
Señor Jesús, apaciéntanos con poder de salvación.

Señor Jesús, nos ahogamos en las dinámicas estúpidas en las que nos meten y nos metemos.
Señor Jesús, oriéntanos en el camino de la vida en abundancia.

Señor Jesús, recomponnos
entre tantos miedos,
entre tantos desasosiegos,
entre tantas desconfianzas.

Señor Jesús,
restáuranos,
revitalízanos,
consolídanos.

Señor Jesús,
auméntanos la fe,
redobla nuestra esperanza.
expande nuestra caridad.

Señor Jesús,
sin ti somos tan poca cosa…

carmeloampelio@gmail.com

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ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 16.06.2024. TIEMPO ORDINARIO 12. CICLO B.

ASOMBRO

Señor Jesús, ante Ti,
asombro de poder optar
por la humildad
constantemente,
conscientemente.
Como Tú.
Contigo.

Señor Jesús, ante Ti
asombro de poder comunicarnos
y constatar la fraternidad última
diaria que nos define
constantemente,
conscientemente.
Como Tú.
Contigo.

Señor Jesús, ante Ti
asombro de poder cuidar
la vida en los detalles
de nuestras relaciones sociales
constantemente,
conscientemente.
Como Tú.
Contigo.

Señor Jesús,
ante Ti,
asombro ante la gratuidad esencial
de estar vivos
cuidándonos unos a otros
constantemente,
conscientemente.
Como Tú.
Contigo.

Señor Jesús, ante Ti,
asombro ante la confianza última
que nos ofreces con tu presencia
en nuestras vidas,
constantemente,
conscientemente.
Contigo, Señor, contigo.

Señor Jesús, ante Ti,
confianza
constante,
consciente
en que todo acabará bien.
Contigo, Señor, contigo.

Señor Jesús,
que ralenticemos nuestras vidas
para saborear de verdad
los síntomas sencillos
de tu Reino
en nosotros,
en los nuestros,
en los que nos rodean,
en lo que nos pase,
sea lo que sea.
Contigo, Señor, contigo.

Señor Jesús,
donde hay avidez insaciable
no estás Tú ni tu Reino.

Señor Jesús,
donde hay prisas
que avasallan
no estás Tú ni tu Reino.

Señor Jesús,
donde hay ostentación
egocéntrica
no estás Tú ni tu Reino.

Señor Jesús, no somos constructores de tu Reino.
Es tu Reino el que nos construye…

carmeloampelio@gmail.com

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ORACIÓN INSPIRADA EN LAS LECTURAS DEL DOMINGO 09.06.2024. TIEMPO ORDINARIO 11. CICLO B.

ABRENOS LOS OJOS

Señor Jesús, ábrenos los ojos para intuir en lo pequeño y cotidiano
la presencia sorprendente de tu Reino,
sin prisa, sin pausa.

Señor Jesús, agudiza nuestro instinto para el bien
y así poder captar tanto y tanto
de bueno y de santo que hay en el corazón
de quienes nos encontramos en la vida,
tan humanos,
tan hijos de Dios,
tan imagen misteriosa
de tu ser en la humanidad.

Señor Jesús, haznos capaces de asombrarnos ante nuestra capacidad
de acoger los dones de la vida en el día a día,
dones imprescindibles
para irradiar
la buena noticia
de que es posible
una fe,
una esperanza
y una caridad
que nos humanicen plenamente,
que sacien nuestra sed de autenticidad
y sosieguen esos miedos
que arañan nuestras entrañas.

Señor Jesús, expande nuestra sensibilidad
para ver en la lentitud cotidiana la fuerza última de tu Reino,
esa fuerza que fundamenta e impulsa
todos los dinamismos de la realidad
en los que estamos implantados,
en los que germinamos
y por los que podemos dar frutos
que muestren que lo mejor de nuestra humanidad
es tu amor y tu cuidado desbordante.

Señor Jesús, purifica nuestra inteligencia
para que descubramos los signos de tu poder
en lo humilde,
en lo sencillo,
en la inocencia,
en lo lento,
en lo que se está gestando,
en lo frágil
pero misteriosamente
palpitante de vida en abundancia.

carmeloampelio@gmail.com

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Horario mes de junio

  • MISAS
    • Lunes a viernes: 9, 12:30 (excepto lunes) y 21 h
    • Sábados: 9, 20 y 21 h
    • Domingos y festivos: 9:30, 11:30, 12:30, 20 y 21 h
  • EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO
    • Jueves: de 19:45 a 20:45 h
  • ACOGIDA DE CÁRITAS
    • Lunes, de 19 a 20:30 h (En caso de lunes festivo, será el miércoles)
  • CONFESIONES
    • Durante las misas
  • SECRETARÍA
    • Lunes a viernes: 18:30 a 21 h